Descubriendo el mundo (y a mí misma) en mis vacaciones de verano

Abby Egnatz explica cómo, siendo una estudiante estadounidense, aprovecha al máximo sus vacaciones de verano en la universidad para vivir nuevas experiencias como au pair en Europa.

Buscando un destino
, en Au pairs

Como estudiante universitaria en Estados Unidos con pocas vacaciones, debo elegir bien mis planes de verano. Antes de empezar la universidad siempre me gustó viajar y sabía que quería irme al extranjero cuando fuera mayor. Una buena amiga de la familia, que había sido au pair en España, me mencionó el au pair como posible actividad de verano. No tenía ni idea de lo que era, ni de que las familias también querían au pairs para periodos más cortos.

Búsqueda en AuPairWorld

Efectivamente, una búsqueda rápida en AuPairWorld.com muestra que hay infinitas opciones para trabajar de au pair durante cualquier época del año. Después de investigar un poco más y hablar con diferentes familias, decidí trabajar de au pair para una familia en Italia durante tres meses en mis vacaciones de verano. Durante esos tres meses, viví experiencias increíbles que me enseñaron muchas cosas nuevas.

Ganar independencia

Antes de ir a Italia, la mayoría de mis amigos y familiares se sorprendieron al saber que me iba a otro continente a conocer a una nueva familia yo sola. Esto alimentó en mí un sentimiento de independencia que no hizo más que crecer a lo largo del verano. 

Desde mi primer vuelo internacional hasta la planificación de viajes de fin de semana, gané más confianza en mí misma y más automotivación. También tuve mucho tiempo para la autoconciencia y la reflexión. Mis amigos notaron esta diferencia de confianza y sensación de independencia cuando volví a la universidad.

Una red de seguridad para superar los miedos

Una de las mejores ventajas de ser au pair es la oportunidad que te da de tener libertad para hacer lo que quieras y superar tus miedos en entornos desconocidos. Aunque esto pueda parecer abrumador y aterrador, tu familia au pair siempre estará ahí para ayudarte. Para mí fue la red de seguridad perfecta que me permitió irme al extranjero y probar cosas nuevas sintiéndome confiada y segura.

La adaptabilidad como nueva (y necesaria) habilidad

En un mundo cada vez más interconectado, la adaptabilidad es una habilidad esencial. Para los estudiantes universitarios que crecen en Estados Unidos, suele ser normal estar expuestos únicamente a la cultura estadounidense y carecer de una visión más amplia del mundo. Estar dispuesto a aprender y adaptarse a otros tipos de vida y entornos interculturales no sólo es importante, sino también emocionante y divertido. Como au pair te sumerges de lleno en una experiencia auténtica que tú y tu familia de acogida podéis personalizar.

La adaptabilidad es también una habilidad transferible que es relevante para el mundo laboral. Responder rápidamente y afrontar con eficacia los cambios y las nuevas responsabilidades es una valiosa capacidad que podrás demostrar a futuros empleadores. También implica que eres capaz de pensar de forma creativa y resolver problemas sin dejar de ser empático con los demás. En las entrevistas de trabajo me he visto recurriendo a ejemplos de mi época de au pair para explicar algunas de estas capacidades transferibles que he desarrollado. 

Tiempo y flexibilidad para hacer lo que te gusta

Una de las mejores partes del au pair es la flexibilidad en el trabajo que tienes que hacer. Cada familia es diferente y es importante comunicar tus horas de trabajo preferidas antes de comprometerte con una familia. Personalmente, he descubierto que tengo mucho tiempo libre mientras he sido au pair.

  • Una de las principales razones por las que volví para un segundo verano de au pair fue el el factor de los viajes. La mayoría de las familias dan dos días libres los fines de semana para que la au pair haga lo que quiera. Como soy estadounidense, he optado por utilizar esos fines de semana para viajar a otras partes de Europa. Ha resultado ser una forma muy rentable y divertida de viajar. Me encanta poder dedicarme plenamente a una zona durante dos días y luego volver a casa y tener tiempo para descansar. En vez de hacer un viaje de una semana que puede parecer agotador y a veces repetitivo, cada fin de semana estoy emocionada, agradecida y llena de energía. Hay muchos chats de grupo en Instagram, Groupme y Facebook que permiten a las au pairs encontrar gente con la que viajar. ¡No tengas miedo de viajar también en solitario! 
     
  • Durante tu tiempo libre, tienes la posibilidad de probar nuevas aficiones o continuar con las antiguas. Yo lo he hecho escribiendo. Creé un blog para que mi familia y mis amigos leyeran mis aventuras. Resultó que disfrutaba escribiendo y me hacía feliz ocupar mi tiempo con esta actividad. Durante este tiempo, incluso intenté empezar mi propio podcast, aunque al final fracasó, al menos lo intenté.
     
  • Aunque es un poco más difícil encontrar libros en mi lengua materna, también he recurrido a la lectura como forma de pasar mi tiempo libre. Siempre digo que me gustaría tener tiempo para leer. Como au pair, es una forma agradable y relajante de desconectar después de un largo viaje de fin de semana. Otras aficiones que he probado durante mi tiempo libre han sido dibujar, nadar, hornear, escribir en un diario y meditar. 

Descansa, relájate y recárgate

Durante una de mis primeras semanas como au pair, antes de haber hecho amigos, llamé a mi madre explicándole lo aburrida que estaba. Ella me contestó: "Deberías disfrutar de este tiempo para descansar, relajarte y recargar tus energías, ya que este tiempo extra puede ser limitado en tu futuro". Enseguida me di cuenta de que, como estudiante universitaria, me esperan veranos y semestres llenos de prácticas, más clases y trabajo. Fue muy agradable oír que se me permitía utilizar este tiempo a mi antojo una vez terminadas mis responsabilidades. Tener miedo de tener tanto tiempo libre como au pair no debería disuadirte, ¡ya que hay muchas cosas estupendas que hacer!
 

Abby Egnatz

Sobre la autora: 
 

Abby Egnatz es estadounidense. Estudia a tiempo completo en la Universidad de Carolina del Norte en Chapel Hill, con una doble licenciatura en ciencias de la información y psicología y una especialización en ciencia de datos. Ha sido au pair en Europa los dos últimos veranos y ha relatado sus experiencias en su blog Abby the Au Pair.